Frases de libros, frases cortas de novelas, citas y fragmentos de libros
Estás en: Frases de Libros > Emile Zola > El paraíso de las damas

Frase del libro El paraíso de las damas de Emile Zola



Ahora era ella la que sufría. ¿Es que no bastaba ya con tener que defenderse de él? ¿Iba a tener ahora que defenderse de sí misma, de las ráfagas de ternura que la privaban, a ratos, de todo coraje? Cuando él le hablaba así, cuando lo veía tan afectado, tan trastornado, no sabía ya por qué lo rechazaba; y hasta pasado un rato no regresaban, desde lo más hondo de su índole joven y sana, el orgullo y la sensatez que la mantenían firme en aquella virginal obstinación. Si se empecinaba, era por instinto de felicidad, para satisfacer su necesidad de una vida sosegada, y no por respeto de unos virtuosos principios. Habría caído en brazos de aquel hombre, rendida a él en cuerpo y alma, si no la hubiese soliviantado, si no la hubiese repugnado casi, entregarse por entero, arrojarse en brazos de quien podía, al día siguiente, convertirse en un desconocido. Temía al amante, lo temía con ese loco miedo que hace palidecer a la mujer ante la proximidad del varón.
+4 ¡Me encanta! No es para tanto
Enviada por Tomás hace 8 años


Imágenes

No se ha encontrado imágenes sobre esta frase de Emile Zola.

Crear imagen con esta frase



Ver más frases cortas y citas de El paraíso de las damas de Emile Zola
Ver más frases célebres, citas y fragmentos de Emile Zola

En FrasesLibros.com...
Ya tenemos 21,709 frases y citas de 1,307 autores. ¡Gracias!

Libros de Emile Zola
Nana (12)
El paraíso de las damas (1)


© 2024 - FrasesLibros.com Top Frases Buscado recientemente Ayuda Contacto & Privacidad Contacto

eXTReMe Tracker