Yo me preguntaba por qué los dioses les permitían hacer el mal y luego los castigaban por ello. Y el misterio permanece sin desentraña. Con frecuencia quiero saber cómo es que Dios puede permanecer mudo, mientras el pecado repta, con sonrisa burlona, por su Casa del Tiempo
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Enviada por Arnau hace 9 años
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