Todos tenemos un carácter determinado que se formó en nuestra más tierna infancia. Lo que experimentamos en aquella época se ha grabado profundamente en nuestra personalidad. Y, aunque tengamos la mejor voluntad de hacerlo, es difícil cambiar. Las personas son como son y muy pocas pueden mudar de carácter, ni siquiera si lo desean con todas sus fuerzas.
+2
Enviada por Gabriela hace 9 años
No se ha encontrado imágenes sobre esta frase de Barbara Berckhan.