(…) precisamente yo, que debía saber que sólo se escriben libros para, más allá del propio aliento, comunicarse con otros seres humanos, y así defenderse de la otra cara implacable de la vida: la fugacidad y el olvido.
+3
Enviada por Rebeca hace 8 años
No se ha encontrado imágenes sobre esta frase de Stefan Zweig.