Si el hombre mortal está sincera y espiritualmente motivado y consagrado sin reservas a hacer la Voluntad del Padre, entonces, puesto que está tan certera y efectivamente dotado por el Ajustador divino que mora en él, no puede dejar de materializarse en la experiencia de ese individuo la conciencia sublime de conocer a Dios y la excelsa certidumbre de sobrevivir para el propósito de encontrar a Dios mediante la experiencia progresiva de hacerse cada vez más semejante a Él.
+3
Enviada por David hace 8 años
No se ha encontrado imágenes sobre esta frase de Anónimo.