Qué palabra tan fea y mediocre, 'compromiso', pensó Nick. Sin embargo, ahora todo fluía mejor, como una puerta chirriante cuando por fin le engrasaban las bisagras. Y el precio que había tenido que pagar Nick por todo ello era el compromiso.
0

Enviada por Viviana hace 9 años
No se ha encontrado imágenes sobre esta frase de Liza Klaussmann.