El padre Valdomero incluso había viajado al vaticano para denunciar los abusos contra los indígenas, pero sus superiores eclesiásiticos le recordaron que su misión era llevar la palabra de Cristo al Amazonas, no meterse en política. El hombre regresó derrotado, preguntándose cómo pretendían que salvara las almas para el cielo, sin salvar primero las vidas en la tierra
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Enviada hace 9 años
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